Artículo escrito por María Teresa Gómez Hernández
Lo primero son las presentaciones: soy docente y llevo más de 20 años trabajando en el área de la formación, sobre todo en la formación para el empleo, tal y como hoy en día se denomina a la formación que se dedica a reciclar y enseñar a un grupo de personas cómo se debe desarrollar las diferentes tareas de una profesión o empleo, o así lo llevo entendiendo y definiendo a lo largo de todos estos años.
Índice de contenidos
La experiencia como docente: un factor clave
Durante estos años he trabajado y trabajo en algo que es mi PASIÓN: el intercambio de información, el conocer formas de hacer y ejecutar tareas, el comunicar, el conocer métodos de resolución de conflictos; el poner en práctica la empatíaLa empatía es la capacidad de comprender y compartir los sentimientos y perspectivas de los demás. Es ponerse en el… Más, asertividad¿Qué es la asertividad? La asertividad es una conducta que se basa en tener la capacidad de expresarse o transmitir… Más, paciencia, capacidad de análisis; la capacidad de generar contenidos y actividades prácticas, y alguna tarea más que en estos momentos no soy capaz de recordar, porque con los años la memoria va siendo selectiva, y solo va utilizando los conocimientos y recuerdos sobre los temas a tratar cuando es esencialmente necesario.
La experiencia como docente debe ir creciendo año a año, formación a formación; además de ir también creciendo la experiencia laboral vinculada a los puestos de trabajo relacionados con la formación que se va impartiendo, porque es importante que lo que un docente transmite a sus alumnos esté relacionado con métodos de trabajo que tenga fundamento en las actividades reales que se ejecutan en una empresa. Y cómo no, es una condición imprescindible para el docente. Sin el qué hacer y cómo hacerlo no seremos capaces de formar a una persona sobre las tareas a desarrollar en un puesto de trabajo u oficio.
Reciclarse como profesional y actualización de contenidos
Es importante el reciclaje del docente, por ello no debemos de quedarnos ANCLADOS en el pasado. Los métodos evolucionan y cambian, y la experiencia se debe nutrir de esas nuevas experiencias, por lo que es necesario regresar a la vida laboral profesional cada cierto tiempo, y empaparse de todo aquello NUEVO que nos ayude a formar a nuestros alumnos.
Por ejemplo, hace años las cartas comerciales se escribían a mano o utilizando una máquina de escribir; hoy en día, esas cartas se envían a través de correos electrónicos, u otros medios. Si nos quedamos en el pasado, seguiremos enseñando a nuestro alumnado a crear cartas como se hacía en los años 70, cuando en la actualidad se redactan y se envían usando el correo electrónico, o WhatsApp.
Es importante el reciclaje docente y la actualización de contenidos. Los tiempos cambian y debemos saber adaptarnos a ellos."
Lo mismo ocurre con los contenidos que creamos sobre los temas que impartimos en las aulas o en las plataformas de teleformación¿Qué es la teleformación? Puede que en vez de conocerla como teleformación lo hagas con el término inglés e-learning, pero… Más, o aulas virtuales, porque eso también ha cambiado queridos colegas de profesión, ya no solo impartimos formación en un aula. Ahora podemos llegar a alumnos que está a kilómetros de nosotros a través de las nuevas tecnologías, o también llamadas TIC´s. Pero este es otro tema en el que ahondaremos más adelante. Volvamos a los contenidos.
Los contenidos también deben ser actuales. Es importante que tengamos actualizados los temas, deberemos comprobar legislación, procedimientos, actuaciones, definiciones, descripciones, apartados; eliminando todo lo que se haya quedado obsoleto y dar paso a los nuevos contenidos, usando herramientas que permita a nuestro alumnado aprender, recodar y reciclar conocimientos.
Práctica vs teoría
Al igual deberemos hacer con las actividades prácticas que están asociadas a esos contenidos, porque estas actividades deberán reflejar de una forma práctica la tarea que la persona debe realizar según los conocimientos aprendidos en la formación. Y que decir tiene, que estas actividades tampoco ESTARÁN ANCLADAS EN EL PASADO. Pongamos un ejemplo: antes los pedidos se hacían usando un documento que se denominaba pedido, que se enviaba por FAX o se hacía llegar al proveedor a través de entrega en mano, o de envío por correo ordinario. Hoy en día, los pedidos se hacen a través de formularios que los clientes rellenan en las páginas web corporativas de sus proveedores, por ejemplo, con lo cual las actividades deberán estar relacionadas con estas nuevas prácticas de trabajo.
Como docentes deberemos de estar totalmente actualizados, nuestro alumnado debe conocer todo lo referente al puesto de trabajo para el que se están formando, y la información debe ser actual.
Cuando un docente, dentro de la formación para el empleo, es capaz de generar sus propias actividades prácticas vinculadas a los contenidos que vienen impuestos por la legislación, siguiendo las capacidades que vienen recogidas en los certificados y observando las realizaciones profesionales, también recogidas en la misma normativa, estará llevando la realidad al aula, y el alumnado estará formado para ocupar el puesto una vez que termine el certificado.
Un docente ha de ser capaz de crear sus propias actividades prácticas y que éstas sean útiles y beneficiosas para su alumnado."
Cambios en los modelos formativos
Por último, como he mencionado antes, la formación va actualizando también el ámbito en el que se va impartiendo. Vamos abandonando las clases presenciales al amparo de un aula, para pasar a clases virtuales o teleformación¿Qué es la teleformación? Puede que en vez de conocerla como teleformación lo hagas con el término inglés e-learning, pero… Más, donde ya no disponemos del feedback directo de nuestros alumnos. En estos casos, los docentes también tenemos que actualizar y modificar los métodos de impartir los contenidos, animar y motivar al alumnado para la realización de actividades, para la participación en los foros y en los chats, que son los instrumentos para compartir e intercambiar información sobre los contenidos y tareas.
En el caso de la formación a distancia, los docentes no tenemos frente a frente al alumnado, no podemos ver si las explicaciones son comprendidas, o si hace falta reforzar contenidos en el mismo momento en el que el alumno tiene la duda, en la mayoría de los casos. Por eso, también tenemos que aprender a dinamizar contenidos, a prever las dudas de los alumnos, para adelantar instrumentos que ayuden a resolverlas; a proponer actividades que refuercen los contenidos para los diferentes perfiles del alumnado, siguiendo siempre la normativa relativa a cada uno de los cursos.
Por lo tanto, reflexionemos, y veremos que un docente siempre tiene que estar formándose. La actualización de los docentes es importante, porque los alumnos no son los mismos de hace décadas. Las empresas van evolucionando en métodos de producción y desarrollo de actividades, y eso también debe tenerlo en cuenta un docente, por lo que la continua información y formación es fundamental.
Un docente no deja de ser también un alumno, lo contrario es un trabajo poco eficiente y que para algunos grupos de alumnos puede resultar válido, pero puede que a la gran mayoría no le resulte efectivo, con lo cual las encuestas de evaluación del docente tendrán una puntuación poco satisfactoria.
Tenemos que ser los primeros en dar un paso al frente para mejorar en nuestro trabajo. Reciclarnos, seguir formándonos, mejorar en nuestros procesos, estar informados, preparados para avanzar, conocer las nuevas tecnologías, estudiar nuevos métodos e instrumentos, en definitiva, ser DOCENTES sin dejar de ser ALUMNOS.
