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El metaverso y su aplicación a la Formación para el Empleo

Artículo escrito por María Teresa Gómez Hernández

La ciencia ha avanzado que es una barbaridad, como dirían nuestros mayores, y en el caso de la Formación para el Empleo, se hace más evidente en la mayoría de los Certificados.

Hasta hace unos años, era impensable recibir formación sin estar presente en un aula. Hoy en día vemos que esto es posible, gracias a las nuevas tecnologías, como pueden ser las plataformas de aprendizaje, las videollamadas, las reuniones online, los chats, etc. A través de estas herramientas podemos intercambiar contenidos teóricos, realizar actividades prácticas relacionadas con los contenidos, reforzando lo estudiado, resolver dudas sobre ellos, o trabajar de forma grupal en proyectos.

Para poder realizar una formación online, tenemos a nuestra disposición: móviles, Tablets, ordenadores portátiles, y aplicaciones como Google Drive, Teams, plataformas como Moodle, etc.

¿Pero qué pasará con la experiencia laboral? ¿Podremos encontrar instrumentos que, sin desplazarnos de nuestros hogares, nos ayuden a practicar en puestos de trabajo simulados?

A finales del siglo XX, se acuñó el concepto de metaverso, cuando apareció en la novela Snow Crash, escrita por Neal Stephenson, donde se define como una especie de espacio virtual en el que se simula la realidad.

Posteriormente, se fueron desarrollando softwares, relacionados con los videojuegos, que representaban un mundo de realidad virtual, en el que los jugadores podían interactuar, diseñar estrategias, y crear personajes para diferentes situaciones virtuales que representaban la realidad.

Aunque, es ya bien entrado el siglo XXI, cuando el fundador de la red social Facebook, apuesta por esta nueva herramienta que va más allá del mundo del juego.

Después de estas breves reseñas sobre la historia del nacimiento de este concepto, podremos encontrar en la web diferentes definiciones del concepto de metaverso, extrayendo de todas ellas una definición como ésta: “entorno virtual a través del que las personas podemos interactuar, utilizando como instrumentos los llamados Avatares o usuarios, dentro del Ciberespacio, que no es más que el reflejo de situaciones reales, sin los límites físicos con los que el ser humano se puede encontrar en el mundo real”.

El metaverso, tal y como lo entiende el fundador de Facebook, sería el reflejo de situaciones reales, y nunca reflejaría un mundo de fantasía o irreal.

¿Podría ser el metaverso esa herramienta que nos permita practicar las diferentes tareas que se pueden desarrollar en un puesto de trabajo?

Los Certificados de profesionalidad incluyen en la definición de los módulos que los componen, módulos de prácticas, en los que se detallan las capacidades que los alumnos deben desarrollar durante su estancia en empresas colaboradoras, en las que se llevan a cabo operaciones o actividades que se han estudiado en los contenidos teóricos del certificado.

Hay en determinados sectores en los que no hay suficientes empresas que puedan colaborar con las entidades que imparten los certificados, para el acogimiento de alumnos que puedan practicar, durante el tiempo estimado, las actividades que se recogen en la normativa. O también, las épocas en las que se deben desarrollar estos módulos de prácticas no son óptimas para que las empresas puedan colaborar y acoger alumnos. O el certificado se puede estar impartiendo en una zona en la que no hay disponibilidad de empresas que puedan colaborar y compartir con los alumnos el desarrollo de las actividades vistas.

¿Podría ayudar el metaverso a reemplazar esas prácticas en empresas por prácticas en entornos virtuales que reflejen la realidad del puesto de trabajo?

Probablemente, en un principio, no será posible esta opción para determinados puestos de trabajo porque requieran de una tecnología muy avanzada y costosa, pero hoy en día las empresas tecnológicas podrían recrear situaciones reales en la que el alumno pueda gestionar actividades laborales relacionadas con su certificado.

Por ejemplo, en los certificados de la rama de Administración, los alumnos podrían practicar con actividades como por ejemplo elaboración de documentos administrativos, atención al cliente, trámites con los organismos oficiales, o gestión de archivos, todo ello en un entorno laboral simulando la realidad, con clientes con los que interactuar, con organismos oficiales ante los que desarrollar las diferentes tramitaciones, algo que es imposible en el desarrollo de los contenidos teóricos, proveedores con los que negociar, tener un equipo de trabajo formado por más alumnos, y tutorizado por personal de empresas del sector, sin necesidad de desplazarse, y sin paralizar la actividad de las empresas de acogida.

Con esta herramienta, se podrían solventar alguno de los inconvenientes citados anteriormente, y los alumnos participarían de forma directa en estas tareas de igual forma que lo realizarían en la empresa de acogida.

El Metaverso podría mejorar la formación para las personas del mundo rural, al igual que las nuevas tecnologías lo están haciendo en el ámbito teórico. Los alumnos del mundo rural muchas veces no pueden realizar formación para el empleo por la imposibilidad de desplazarse diariamente a los centros de formación, ya que la distancia y la ubicación no facilitan esa asistencia. En este caso, la teleformación está colaborando a que la formación para el empleo también llegue al mundo rural. Por eso mismo, el desarrollo de las prácticas no laborales para estos alumnos podría solventarse gracias a situaciones recreadas en el metaverso.

Será una herramienta que facilite el desarrollo del alumno y elimine obstáculos en el su aprendizaje. Por ello, esperemos que, en un breve periodo de tiempo, sea una realidad y nos permita dar un mejor servicio y formación.

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Diego Colinas

Con raíces en el periodismo y experiencia en el Real Valladolid Baloncesto, ahora lidera el marketing digital en Grupo Aspasia.

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